¿La política económica vuelve a la primera plana?

El inicio de Abril viene con noticias poco alentadoras respecto de los indices de inflación y precios. Guerra contra la inflación mediante, el Gobierno tiene algunas estrategias bajo la manga.

El alza en el Indicador de Precios al Consumidor (IPC) del INDEC dará para marzo un resultado por encima de los 6 puntos porcentuales, siendo la marca más alta del año, según creen las fuentes oficiales, aunque esperan un leve decenso para cuando se mida el mes de Abril, un mes donde el impacto del conflicto bélico entre Rusia y Ucrania tuvo, sin dudas, un gran impacto en todos los rubros.

¿Que dicen las mediciones privadas? Por su parte, El JP Morgan presagió un 5,8 por ciento, la consultora LCG un 6,3 y otras entidadas como Consumidores Libres, un alza de 5,2 por ciento en 21 productos de la canasta básica en el período de Marzo. Según ésta última, los productos de almacén son los más importantes, haciendo hincapié en lácteos, con subas de más del 15 por ciento, donde justamente el Gobierno quiere apuntar.

¿Cuál es la Estrategia Oficial?. Más allá del refuerzo de los Planes Sociales y el Programas de Precios Cuidados, Alberto Fernández busca un adelanto de Paritarias del Sector Privado, con aval de la CGT, y se suma el aumento del 50% en la Tarjeta Alimentar, pero el foco va más allá según varias fuentes cercanas al oficialismo, y nos indica que, con aval del FMI, un fuerte aumento al presupuesto de las asistencias sociales "está garantizado" para cuando sea necesario. Un aumento del cual el ala "albertista" dice nunca haber renegado, y queda en cierta forma demostrado con los datos de AFIP, donde los ingresos crecieron 62,5 por ciento interanual, acumulando 19 meses seguidos de mejora.

Expectativas a Futuro. La esperanza oficial es que abril sea un mes de baja inflacionaria, (que aún rondaría más del 5 por ciento); Sucede que, de abril en adelante se correrán aumentos por una vez, como el de combustibles y el de tarifas, que aún no se aplicaron con fuerza.

Por otro lado, y referido a la crisis de combustibles que derivó en otra mesa de trabajo entre el Gobierno y el Sector Privado, Alberto Fernández se aseguró este jueves que Bolivia, actualmente un régimen aliado del oficialismo, continuara con la provisión de gas en los mismos volúmenes diarios que en 2021, pudiendo adquirir un volumen de gas natural boliviano de 14 MMm3/día.

"El contrato vigente se mantiene en las mismas condiciones", dijo el presidente Fernández en la conferencia de prensa conjunta con Luis Arce, el primer mandatario Boliviano, agregando que "en el caso de que Bolivia incremente su producción de gas, la Argentina tendrá prioridad". "Celebramos contar con ese gas seguro, en función de que en los últimos años Bolivia tuvo un decline en su producción, por lo tanto aspiramos que el incremental pueda llegar lo antes posible", dijo el presidente argentino en la conferencia de prensa.

Los mandatarios acordaron también avanzar en posibilidades de inversión para YPFB en Vaca Muerta, y en la identificación de alternativas de suministro de hidrocarburos líquidos.