¿Qué dice la ciencia respecto a ser amigo de tu ex?

Este tema de querer ser amigo de tu ex de algunas de tus ex-parejas con las que mantenías sobre todo una relación más en la categoría sentimental o romántica, resulta de lo más controversial dentro de las relaciones actuales. Te pusiste a pensar ¿por qué querés ser amigo o seguir en contacto con una persona con la que previamente ya elegiste un camino distinto? Habrá quien decida quedarse simplemente por algo tan importante como el hecho de que no hubo una ruptura traumática o un suceso relevante como para no poder continuar en una relación amistosa, mientras que para otros, hacerlo podría ser porque no han superado la separación y sí es lo único que la otra persona tiene para ofrecer y vos para recibir, no queda más que el decidir asumir este papel con tal de seguir en contacto de alguna manera, algo deprimente, pero sí sucede; o se podría considerar otra opción, que no prosiga la relación emocional, pero quede esa chispa de lo sexual que eso sí, encadena.

¿Es buena idea ser amigo de tu ex?

Acorde con Weena Wise, una experta terapeuta matrimonial y familiar con más de 15 años de experiencia trabajando en el rubro, en entrevista para la plataforma Mind Body Green, dice que “ser amigo de tu ex puede ser una buena idea cuando otros aspectos de la relación fueron valiosos para tu crecimiento, desarrollo o metas de vida; si tu y tu ex identifican que son mejores socios comerciales, compañeros de trabajo o amigos y pueden mantener límites saludables entre ustedes, entonces el crear una amistad auténtica podría funcionar. Especialmente es benéfico cuando se tienen hijos juntos”.

Los expertos afirman que ser amigo de tu ex es posible, pero dentro de criterios y límites sanos. Un estudio de la revista científica Personality and Individual Differences de Elsevier a cargo de Justin, K. Mogilski and Lisa. L.M. Welling, explica que la “amistad post-noviazgo, matrimonio, relación” puede tener consecuencias positivas y negativas respecto al estrés, el afrontamiento y la salud en general, dependiendo de los tipos de estrategias para lidiar con la ruptura utilizadas por cada miembro, así como la medida en que cada uno se comprometa en el comportamiento de mantenimiento de la amistad, las percepciones de control sobre la ruptura, la aceptación de la separación y hasta qué punto la amistad sigue proporcionando recursos valiosos. Es por ello que es más probable que las ex-parejas sigan siendo amigos después de una ruptura, si tenían una amistad previa a la relación romántica. En su marco teórico, además se incluye la parte en que este tipo de amistad post-relación también puede surgir como respuesta a una relación platónica, que involucra un interés romántico o sexual que ha cesado.

Esto es lo que ser amigo de tu ex revela de tu personalidad, según el estudio

La investigación de Mogilski y Welling dilucidó las razones por las cuales las personas se quedan como amigos después de una ruptura. Después categorizaron esas razones según la frecuencia y, por último, examinaron la medida en que las características clínicamente relevantes y no patológicas de la personalidad y el sexo predicen la importancia de esas razones. En este último aspecto, analizaron algo que denominaron como los “rasgos oscuros de la personalidad” que son una colección de conductas antagónicas y estilos personales que se asocian al desagrado, la manipulación, la insensibilidad o la explotación, las personas que obtuvieron una puntuación más alta en estas cualidades, tienden a elegir amigos con fines estratégicos y, por ende, es probable que todo lo anterior, se asocie con la valoración de las amistades por razones utilitarias o instrumentales, como sería el hecho de mantener la relación solamente para obtener sexo.