La Argentina de medio término, una radiografía electoral

Luego de un Domingo Electoral, con resultados esperables y para nada sorprendentes, nos queda pensar en el Panorama de los dos años de gestión restantes de la coalición dirigida por Alberto Fernández. Desde la oposición, se le reclama un "cambio de rumbo", pero no se especifica cuál. Por su parte, el Gabinete demarca el plan a seguir, acorde al nivel de gobernabilidad que tenga según como quede conformado el Congreso de la Nación. ¿Continuidad o Ruptura? Mucho de ello dependerá de si el propio Peronismo (Oficialista) pone o no a funcionar el aceitado y complejo sistema comunicacional-territorial-evocador del Partido Justicialista, que incluye las patas Militantes, Dirigentes, Sindicalistas y Empresariales. En una elección donde votó el 71% del padrón, la participación más baja desde el retorno de la Democracia, los encláves interpretativos son fundamentales.

¿Puede el Peronismo apropiarse de la Pos Verdad? Ésta podría ser tranquilamente una pregunta-disparador para pensar el por qué de los grandilocuentes festejos en el Día de la Militancia, donde el único orador fue el Presidente, y con frases como "el triunfo no es vencer, si no darse por vencido" (que tuvo su confuso Retweet a través de Tolosa Paz). Algunos podrán interpretarlo como la reafirmación del primer mandatario, y un intento de anclar su imagen, otros como simplemente una "bajada de precio" al resultado de las Elecciones. Pero la realidad es que el discurso trajo mucho más que eso.

Los Resultados

En Rigor, y en cuanto a la Cámara de Diputados respecta, Frente de Todos logró renovar 50 de sus 52 bancas en juego quedándose con 118 Diputados propios, y lejos de los 129 necesarios para dar quórum propio, lo que lo obligará  a buscar acuerdos con las fuerzas provinciales. En la vereda del frente, Junto por el Cambio sumó una banca más a las 60 que tenía en juego, y pasa a tener un total de 116 diputados en el recinto. La Izquierda del FIT pasó de 2 a 4 bancas, posicionandose como tercera fuerza a nivel nacional, y los nuevos ingresos tienen que ver con La Libertad Avanza, con Espert y Milei a la cabeza, que lograron tres bancas. 

Aún con mayoría, el oficialismo nacional perdió el Quórum propio también en el Senado, donde no pudo retener sus 41 bancas, quedándose asi con 35 en total. Por su lado, Cambiemos pasó a tener 31 bancas en total, no llegando al as 37 necesarias para dar quórum sólo con sus espadas. Ambas fuerzas se verán obligadas a negociar entre sí, o buscar el acompañamiento de las 3 Bancas Distritales, entre las que se encuentra la electa Alejandra Vigo, o a pactar con lo que queda del Interbloque Federal, en última instancia.

Las Proyecciones

En Córdoba, aunque el mapa electoral cambia, la diferencia es más abrumadora aún. De los 119 en Capital, Juntos por el Cambio ganó 106, y en la Provincia, el FtD local solamente mantuvo su 10% a base de los departamentos del Norte. En la Capital, este resultado lleva a que, tanto Luis Juez como Rodrigo de Loredo, obtuvieran más del 55% de los votos, cuando Hacemos por Córdoba no pudo si quiera proyectar el 25% que tiene en la provincia. la gran pregunta es si esta vez los resultados podrían replicarse en 2023, donde el panorama no es nada claro para el legado del Cordobesismo.

Para el Oficialismo Provincial no hubo #17N. No lo hubo por una cuestión de diferencias: mientras que el acto a nivel nacional tuvo respaldo explícito del PJ Nacional, cuyo presisdente es el Primer Mandatario, a nivel local, ni si quiera la CGT Córdoba se hizo presente de manera orgánica. Sucede que Hacemos por Córdoba es una estructura partidaria que absorvio hace largo tiempo al PJ Local, y que el Schiarettismo, con la meta de refinar el legado de diferencias con la Nación que dejó sellado y enlacrado José Manuel De La Sota, sabe que con el Peronismo sólo no alcanza, pero que del mismo, y por tanto, de sus fechas evocadoras (no convocadas por el Gobernador o realizadas en silencio y casi que puertas adentro) no se puede prescindir. 

La voz de alarma no la da una desintegración territorial de HxC, la cual no existe. La voz de alarma la da el 25%, y esos 5 puntos o más que se fueron diluyendo hacia otras ofertas electorales desde el aproximadamente el 2013 en adelante. Sí, sabemos que en ese momento Cambiemos no estaba consolidado como tal, y que reinaba la UCR unívocamente en la Capital. Más allá de eso, el hecho de fondo no cambia: tanto Hacemos por Córdoba (Ex Unión por Córdoba) como el Kirchnerismo y sus colectoras progresistas (sobre todo las que incluyeron a Cristina, FpV, Unidad Cuidadana y Frente de Todos) nunca lograron "ganar" una elección de medio término; y cuando decimos nunca, es literalmente nunca, pero esto no le quita peso a los porcentajes.

Esto nos lleva a preguntarnos, más allá del retorno de personajes como Luiz Juez, que estuvo prácticamente en cuanto frente electoral existió, y el fenómeno libertario, aún inexplorado (y extendible o no al resto del país) o de los mismos resutados del Kirchnerismo local una y otra vez, ¿cuánto márgen más le queda a Schiaretti para seguir jugando a lo que en su momento se llamó en la prensa hegemónica "Corea del Centro"?; el foco está, sin duda alguna, en el 2023, y el Panal empieza a trabajar su estrategia con pedidos de unidad desde adentro y desde afuera de su riñón. 

En Rigor, entre las PASO y las Legislativas 2021, la enorme campaña Publicitaria llevada adelante por Hacemos por Córdoba en aquellos dos meses de diferencia no movieron ni si quiera medio punto el amperímetro. En criollo, el discurso de Nación Vs Córdoba, Córdoba como una Isla, o cualquier variante del mismo fue incluso mucho mejor capitalizado por Juntos por el Cambio, que por el Schiarettismo, por lo menos a nivel votos. Entonces ¿El voto a Juntos no es orgánico? ¿Es un voto castigo?. ¿Por qué el votante indeciso o antigrieta no eligió al Partido Cordobés? es la pregunta que aqueja sin dudas al Oficialismo Local, y también a los dirigentes del Municipio.

¿Que estrategias pone cada coalición de cara al futuro?

Sin duda, la estrategia del Panal apunta un Binomio Llaryora - De la Sota, del cuál cabría preguntarse si tiene el carisma necesario que siempre caracterizó a sus representantes, pero parecería que no hay mucho más que decir al respecto. Salvo claro, el recelo de los dirigentes territoriales que se preguntarán si la banca perdida a manos de JxC fue por falta de recursos. La alternativa sería anclar el Peronismo Local en la Municipalidad, para tratar de tomar ese bastión y no meramente regentearlo, con mucha publicidad pero sin propaganda. Schiaretti, lejos de una proyección presidencial.

Por parte del Oficiailismo Nacional, el plan es claramente avanzar en la institucionalización orgánica del FTD como sujeto político con características propias. Es borroso el horizonte en el cual esto "signifique una suerte de divorcio con el Kircherismo como cultura política", pero si cabe preguntarse hasta donde la misma Cristina querrá intervenir.

La tensión Post renuncia-masiva-y-reemplazo de Ministros pareció ser mas bien aliviadora que conflictiva para las partes, y por ahora los roles están bien definidos. Alberto da la cara institucional internacionalmente, y de vez en cuando secunda a Guzmán, que se ocupa del FMI; Massa mantiene los paños fríos en en Diputados, lanzando alguna que otra indirecta, pero muy tranquilo; y por último Cristina, comanda de a ratos en el Senado, donde ahora tendrá un escenario tanto más tenso, y principalmente se encarga de mantener a su base electoral con una suerte de "Misa Light", que incluye eventos menores, del estilo de lo que fue la presentación de su libro "Sinceramente".

El discurso de Alberto del Día de la Militancia, el apoyo de los Gobernadores, las reuniones con la CGT y el Plan Económico no hacen más que inaugurar lo que nos preguntamos al principio de esta nota, ¿Se echará a andar la Locomotora del PJ? Todo indicaría que si, solo resta saber cuándo y definir algunos  cabos sueltos, como el no menor acuerdo con el FMI. “El FdT necesita institucionalidad porque si no eso promueve dispersión y atomización y eso es un riesgo”, dice Capitanich, otro cercano a Cristina que sabe que con el 30% y este batacazo opositor, no alcanza, y que incluso plantea dirimir las candidaturas presidenciales en las próximas PASO... ¿Se volverá a convocar a los nuevos Outsiders como Moreno y Randazzo? Por lo pronto, quien volvió para quedarse es Aníbal Fernández, así que no podríamos descartar un escenario así.   

Por último, ¿Qué se puede avizorar en el horizonte amarillo a nivel Provincial? Sin ninguna duda, el resurgimiento de Juez fue resultado de muchos factores. Hablamos desde la estrategia para capitalizar el voto bronca que tiene el Ex Intendente, hasta la coyuntura que lo puso a dónde hoy está: un personaje claramente peronista en un enclave donde la UCR es la que le pone el territorio a Juntos por el Cambio, y que el estrepitoso resutado de las elecciones municipales que dieron como ganador a un incipiente Martín Llaryora, le abrió la ventanilla para posicionarse en el mostrador.

Sabemos que este resultado pone al Binomio como elegible para la Gobernación, más allá de la estrategia que quiera aplicar en su momento HxC. Lo que no sabemos es si una estructura como la UCR local querría un Peronista, con un prontuario como el de Juez, en el lugar de mandatario. Pero también es curioso que si hubieran querido deshacerse de él, hubieran apoyado directamente a los candidatos de Macri, y no a los de Larreta y Bullrich. Por lo pronto, el nivel de alcance mediático que tiene Luis Juez en Buenos Aires, y por ende a nivel nacional, hace que este proscripta cualquier queja hacia el electo Senador, por lo menos pública. Tendremos que ver que sucede cuando la euforia pase, y el candidato sin partido quede nuevamente en las sombras, con un puesto o no, como la estuvo hasta ahora.