
La deuda externa, tema del cual ocupamos gran parte del 2021 y principios del 2022, vuelve al centro de la escena. Massa reaparece con una jugada de recompra de deuda que tiene efectos a corto plazo, pero la cual está sujeta al contexto en el cual se encuentre el país en el periodo 2023-2026, donde el calendario de pago apretará aún más las reservas, con vencimientos de hasta 6.000 millones de dólares. ¿Podrá el traspaso de manos de esos bonos nuevamente al sector público revalorizar su precio? ¿El riesgo país seguiría a la baja? ¿Cuál es el futuro de la economía real?